ESCENAVIVA
Hoy por hoy, los niños de ciudad crecen de cara a las pantallas, sea de la televisión o de la consola o del ordenador. A la obligada actitud atenta en la escuela, se suman las actividades ...
Descripción "ESCENAVIVA"
Hoy por hoy, los niños de ciudad crecen de cara a las pantallas, sea de la televisión o de la consola o del ordenador. A la obligada actitud atenta en la escuela, se suman las actividades extraescolares. Cumplidas estas obligaciones, es la hora de relajarse, cómo no, viendo dibujos animados o jugando a la consola, porque los niños ya no juegan en la calle.
Y tanto en los dibujos como en las consolas, lo más común y facilón a nivel de guión, es que los admirados protagonistas entren en rencillas y luchas de poder más o menos sofisticadas. A golpes o con pulsos de energías mágicas, los héroes de hoy siempre se tienen que enfrentar. Y los niños, a la hora de relacionarse con sus semejantes, cuando no hay maestros que les aleccionen o pantallas que mirar, es cuando se encuentran cara a cara, en la vida real, y aplican los patrones de relación que ven reflejados, las peleas de los Gormiti o las ladinas intrigas de Patito.
Desde escenaviva proponemos algo en el ámbito educacional: los talleres de juegos tradicionales. En torno a ellos, para su práctica e instauración dentro del repertorio lúdico de los niños, podrían organizarse a posteriori, "dias especiales" con liguillas para competir a través de estos juegos que no usan pilas, ni son caros, y permiten a los niños relacionarse socialmente de un modo natural: jugando.
En escenaviva, durante dos años consecutivos hemos tenido el honor de actuar para los niños saharauis que son acogidos en verano por familias españolas. El primer año, con el show festivo de Ludovico y Castañuela, pudimos comprobar la capacidad de disfrute y participación de estos niños que viven en lugares humildes y sin apenas recursos. El segundo año ofrecimos uno de estos talleres de juegos tradicionales, y fue maravilloso comprobar que muchos de estos juegos eran conocidos y practicados por estos niños. Fue para los niños españoles para los que estos juegos de nuestra niñez supusieron una sorpresa. Pero sí que resultó una manera de relacionarse dejando de lado el idioma, las circunstancias y el entorno personal de unos y otros.
Porque hay habilidades sociales que no se aprenden estudiando, se aprenden jugando.